No hay que pagar «impuesto al sol» por nuestra instalación solar doméstica
Hay algo que estamos leyendo y escuchando mucho estos últimos años sobre la necesidad de pagar el tan nombrado “impuesto al sol” si se dispone de una instalación solar doméstica. Incluso hay medios que han anunciado penas de prisión por tener instalados paneles solares en determinados lugares. Obviamente, se trata de informaciones falsas e interesadas, que no se sabe muy bien por qué se hacen virales y llegan a tantos sitios.
El “Impuesto al sol” se basa en instalaciones que superen los 10.000 Watios, así que supera ampliamente lo que se espera de una instalación solar doméstica. Además, si la instalación no está conectada a la red eléctrica, que es totalmente independiente, no tiene un límite de potencia.
Si la instalación solar doméstica no está conectada a la red eléctrica, no tiene límite de potencia frente al “impuesto al sol”
Si la instalación solar doméstica está conectada a la red eléctrica, es mejor evitar volcar la energía sobrante en cada momento a la misma. Pero, sin embargo, se puede optar por utilizar la energía proveniente de la luz solar para reducir el consumo de electricidad de la red tradicional.
Para ello están los inversores solares Axpert, que se encargan de gestionar el origen de la electricidad que se está utilizando en cada momento. Se puede programar para que se utilice la energía que llega desde los paneles solares mientras estos tengan radiación solar y cambiar el origen de la misma cuando estos no producen suficiente energía.
Es decir, durante el día, si hay bastante radiación solar, la electricidad llegará desde los paneles y si la potencia no es suficiente o se hace de noche, se activará el acceso a la red tradicional para que no haya ningún momento en que falte electricidad.
Una ventaja más que puede hacer que la instalación solar doméstica nos haga ahorrar mucho dinero en la factura mensual de electricidad, sin que nos tengamos que preocupar por ese tan nombrado pero inaplicable “impuesto sobre el sol”.